A LOS VECINOS DE MORATALAZ
La crisis del sistema capitalista se ceba con los barrios trabajadores de nuestro país; Moratalaz, como tal, no es una excepción. Día a día, los comercios van cerrando; ya empezamos a ver vecinas y vecinos obligad...os a buscar comida en los contenedores de basura, algo que en este distrito nunca había ocurrido; la privatización y decadencia de los servicios y derechos básicos conseguidos por la lucha de la clase trabajadora va en aumento. Los ejemplos son abundantes, los conocemos y los sufrimos:
Las aulas de los centros públicos se muestran cada día más abarrotadas. En los Institutos y colegios del barrio han sido despedidos muchos profesores; la consecuencia es que las aulas se saturan, se llegan a acumular más de 30 alumnos por clase. Y mientras las aulas se masifican, algunos centros públicos, además de verse faltos de presupuesto para poder desarrollar su función con eficacia, son condenados al abandono. Un claro ejemplo lo encontramos en el antiguo “Gil Alberdi”, cerrado desde hace años y recuperado por y para los vecinos y vecinas el pasado mes de noviembre mediante su ocupación.
A los jóvenes universitarios les han subido las tasas, lo que fuerza a los menos pudientes a abandonar la carrera por no poder pagarla. Los hijos de los trabajadores vuelven a no tener derecho a la enseñanza universitaria.
Día a día vemos cómo la lacra del paro y la falta de ingresos hacen mella en nuestros hogares, llegando a la brutal consecuencia del desahucio. Un drama que en nuestro barrio también se da. En él se materializa la brutalidad intrínseca de un sistema al servicio de los bancos, cuya codicia prioriza el dinero frente al derecho a una vivienda digna. El número de familias que son desahuciadas no para de crecer. Tan culpables son el PP y el PSOE, responsables de las leyes que posibilitan los desahucios, como los jueces que los ordenan y los policías que los ejecutan.
Los servicios sanitarios están bajo seria amenaza de desaparición. En el Centro de Especialidades de Pavones se está derivando a muchos pacientes a la sanidad privada, demostrando una vez más que para el PP de Madrid no somos pacientes, sino clientes.
El 27% de los habitantes de Moratalaz son jubilados o están en edad de jubilarse; la congelación, primero y la subida del 1% después, de las pensiones, frente a un IPC (el coste de la vida) que crece al 3%, produce una bajada encubierta de éstas, haciendo que pierdan poder adquisitivo. Su situación económica ha pasado de ser delicada a precipitarse en una pobreza cada vez mayor. Se rescata a los bancos con el dinero que se hurta, entre otros, a nuestros mayores.
La corrupción se deja ver también en nuestras calles: el Intercambiador de Pavones está actualmente cerrado por hundimiento, debido a que el material usado y el suelo en que está edificado no son apropiados. Lo mismo pasa en la Junta Municipal, clausurada desde hace meses, y de la que se está despidiendo a empleados públicos por “falta de presupuesto” cuando hasta hace pocos días tenían al convicto de homicidio Carromero como asesor cobrando 50.000 euros al año.
Todo esto, sazonado con un acoso policial cada vez más estrecho, que afecta especialmente a jóvenes e inmigrantes, pero también a cualquiera que se organice y se manifieste contra una situación cada vez más intolerable.
Es preciso que donde vivimos, en nuestros barrios, los trabajadores empecemos a dar una respuesta contundente.
Por ello, convocamos a los VECINOS Y VECINAS de MORATALAZ a que acudan el SÁBADO 13 de ABRIL a las 12:00 a la MANIFESTACIÓN que transcurrirá desde la JUNTA MUNICIPAL hasta la Pza. del ENCUENTRO.
“NO SOÑAMOS CON SALIR DEL BARRIO, SOÑAMOS CON CAMBIARLO Y DARLE FUTURO AL VECINDARIO”.
COORDINADORA DE COLECTIVOS DE MORATALAZ
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